¿Qué hay detrás de los días de…? Algún interés, seguro, pues de otra manera no se entiende que el calendario esté acribillado por los centros comerciales para celebrar y celebrar. Quizás lo que en un principio surgiese para recordar a muchos de los humanos que hay que tener un detalle con tu pareja, tu madre, tu padre…, ante tal éxito, había que ir llenando todos los días del año con algún evento, y ya no quedan días.

Me he hecho muchas veces esta reflexión, pero el domingo caminando a la orilla del río Águeda, cruzando la pesquera, saltando los pontones, dándome el primer baño, la verdad es que veía hasta donde había llegado tamaño disparate, que hoy se celebre el día del medio ambiente. ¿Qué haremos hoy con nuestro río, al que veo más triste que nunca? ¿Qué haremos hoy con sus orillas donde el verde ha quedado abrasado por los calores? ¿Qué haremos hoy con unas aguas donde cada vez hay más plantas robándole el poco oxígeno que le queda? ¿Qué haremos hoy para tapar tanta desvergüenza, como el incendio que me imagino provocado en su misma orilla? ¿Y por último qué haremos hoy para nuestro río deje de estar triste?

El río está triste, bajan por la pesquera hilillos de agua que recuerdan lágrimas de llanto y de dolor. Si en todas las celebraciones destaca la alegría, la fiesta, ¿hay motivos hoy para celebrar cómo está el medio ambiente? Sinceramente me temo que no. Eso sí, los medios abrirán hoy sus telediarios anunciando a bombo y platillo este día, donde tampoco faltarán a su cita los políticos. Eso sí, a veces excepciones positivas como la programación de la 2 estos últimos días, la campaña “Zero waste España” (cero residuos), actividades en unos cuantos centros educativos para sensibilizar a sus alumnos. Como en todas las celebraciones, se escucharán mensajes muy bonitos, sentidos, apasionados, que el 6 de junio los habrá llevado el viento embrujado que está soplando y arrasando cosechas y pastos, secando arroyos, dejando a nuestro río llorando lágrimas de cocodrilo deslizándose pesquera abajo.

Y el resto del año ¿qué?. ¿Se puede hacer una política ambiental un solo día al año? ¿Cuánto han dedicado los políticos al tema ambiental en la insufrible campaña electoral? Poco, y ese poco no vende, no es visible, importa más el procés, Cataluña, despertar su odio, el reparto de escaños, …Por otro lado, si alguno que desde el poder político, quiere poner un grano de arena para solucionar el grave deterioro ambiental-Madrid Central-, los ciudadanos le dicen que deje los atascos en paz, que son patrimonio de los madrileños. Qué distintos seguimos siendo de los europeos, donde los partidos ecologistas tienen bastante implantación, en Alemania incluso han ganado las elecciones europeas.

La semana pasada, fui testigo en nuestra plaza mayor de un comentario que seguro que muchos habrán escuchado más de una vez, una pareja de turistas, él haciendo la foto a ella en medio de la plaza, coches para arriba, para abajo, derecha, izquierda, que intentaba sortear como podía, ella le dice que por favor intente no sacar coches de fondo, que la plaza es muy bonita: él que ya no sabía cómo ni dónde de coger el ángulo del ayuntamiento, le contesta: lo que queremos es imposible: no hay foto. ¿Es tan importante para la vida económica de la ciudad que la plaza esté llena de coches en horario laboral? En cambio, ¿no interesa que en nuestra maravillosa ciudad, sean los peatones y las bicis los dueños del asfalto?

Creo que no, pero ni en nuestra ciudad, ni en gran parte de España, aunque hay ciudades donde las bicis empiezan a reinar. Pero hay un sentir general de que el coche debe seguir mandando en las ciudades, así se entiende por qué los partidos verdes, los que luchan los 365 días por el medio ambiente en esta España nuestra sean insignificantes.

Ya son muchos y constantes los avisos, no se nos estará haciendo demasiado tarde como reflejaba genialmente El Roto en su viñeta la semana “Cuando por fin los dos partidos decidieron construir un puente, el río ya estaba seco”. El llanto del río, se podría haber solucionado si no se hubiese dejado escapar tanta agua del pantano, precisamente para construir los pilares de un puente por donde ahora baja un hilillo de agua.

Es difícil la educación ambiental, como todo aquello que huele a valores, pero hoy es más necesaria que nunca, sino que se lo digan a los peces que intentan, subir por la corriente de los pontones en busca de más cantidad de agua, o a los peces del mar que en 2050 habrán sido superados en número por los plásticos, o los países de este asiático que ya no recibirán más plásticos de los países ricos, difícil pero necesario. El cambio de la política medioambiental es más necesaria que nunca, pero no solo el día del medio ambiente. Como dijo Albert Einstein “Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”, el cambio de dirección es una obligación.

Antonio Castaño
Me encanta recorrer caminos con mi mochila a cuestas, me ilusiono con las cosas pequeñas, especialmente con la naturaleza, sin ella el caminar sería complicado. Me gusta compartir relatos, fotos, proyectos, reflexiones...

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